Si bien es cierto que la responsabilidad directa en pervencion de embarazos no planificado en las adolescentes, es tarea directa de los padres de familia con sus hijas e hijos, también es importante resaltar que las oficinas de salud municipal y los hospitales locales deben atender establecer estrategias para evitar esta grave problemática, que en Aguachica desconocen estas entidades.
En esta medida, la atención, el cuidado y la educación de los infantes y adolescentes con miras a la prevención del embarazo adolescente debe convertirse en tarea urgente de la agenda política de todos los municipios y traducirse en políticas públicas que pongan en marcha programas de prevención y acciones pedagógicas dirigidas a la población más joven.
Riesgos psicológicos y sociales del embarazo en adolescentes
De hecho, pueden condenar a estas familias a una vida de miseria y violencia:
1. Al abandonar los estudios, dejan de desarrollar las cualidades de las mujeres empoderadas.
2. Muchas sufren pérdidas espontáneas o simplemente caen en las terribles prácticas del aborto clandestino, lo que puede suponer un terrible trauma a nivel emocional.
3. Los embarazos a temprana edad en países desarrollados a menudo concluyen en la conformación de hogares con gran inestabilidad psicológica, por otro lado; en los países del tercer mundo suelen formarse hogares de bajos ingresos con múltiples niños a cargo.
4. Como el embarazo adolescente no les permite independizarse, terminan por dedicarse al trabajo no remunerado.
5. El embarazo en adolescentes puede llevar a las madres a graves trastornos psicológicos, ansiedad, rechazo al bebé, miedo al rechazo, depresión y estrés postraumático.
6. Es decir, la prevención de embarazos en adolescentes evita la perpetuación de familias disfuncionales, en donde la mujer es la más expuesta debido al desarrollo de la dependencia económica y carencias afectivas.