Durante el transcurso de este año, se ha evidenciado una preocupante problemática en el municipio relacionada con la alta cantidad de accidentes de tránsito que ocurren en diferentes puntos de la ciudad.
Este miércoles en la noche, se registró un incidente protagonizado por dos motocicletas en la intersección de la calle séptima con carrera 14, que, según información preliminar, se habría dado porque ambos conductores omitieron la señalización del semáforo en rojo.
Este suceso pone en evidencia que gran parte de la siniestralidad en la ciudad es resultado de la imprudencia de los conductores. Si bien el mal estado de la malla vial y la falta de señalización en algunos lugares han contribuido a este tipo de incidentes, es innegable la gran responsabilidad que recae en cada uno de los actores viales.
Existen opiniones que sostienen que las autoridades de tránsito deberían ejercer una mayor regulación, pero la realidad es que la escasa cultura ciudadana y la falta de cumplimiento de las normas en Aguachica han llevado a un deterioro significativo en la movilidad de la ciudad, haciendo que nos enfrentemos a un desafío que requiere un cambio profundo en nuestra forma de conducir y de respetar las leyes viales.
Es importante cuestionarnos si es necesario que exista una autoridad constantemente vigilando para que se cumpla lo correcto. ¿Cómo funcionan entonces las grandes ciudades que no tienen una regulación continua y aun así logran un cumplimiento generalizado de las leyes? Esta reflexión nos invita a replantearnos el papel que cada uno de nosotros desempeña como ciudadanos responsables en la construcción de una comunidad más segura y ordenada.