El inicio del año escolar en Aguachica ha traído consigo un escenario preocupante para las familias rurales del municipio. A pesar de que cientos de estudiantes ya se han reincorporado a sus clases en el casco urbano, aquellos que residen en veredas como Barrancalebrija, Santa Lucia, Limoncito, Caño Adentro y Campo Amalia se han visto gravemente afectados por la falta de transporte escolar. Esta ausencia ha ocasionado que muchos niños y niñas no puedan asistir a sus instituciones educativas de origen, generando un aumento en la deserción escolar en estas zonas.
El problema radica en que, debido a la falta de contratación del servicio de transporte, muchos padres han decidido matricular a sus hijos en municipios cercanos como Río de Oro y San Martín, donde este servicio sí está garantizado desde el inicio del calendario escolar. La secretaria de Educación Municipal de Aguachica, al respecto, señaló que, aunque se ha destinado un presupuesto de $1.400.000 para cubrir 49 días de transporte escolar, aún quedan vacíos de recursos para cubrir la totalidad del calendario escolar.
Este retraso en la contratación del servicio ha sido una problemática recurrente en años anteriores, con la falta de presupuesto y las demoras administrativas como los principales factores. A pesar de los esfuerzos de la administración municipal por buscar apoyo de la Gobernación del Cesar, no se ha logrado una solución definitiva, lo que deja a los estudiantes rurales en una situación de vulnerabilidad.
La comunidad educativa de las zonas rurales de Aguachica ha pedido con urgencia a la alcaldesa Greisy Roqueme que priorice la contratación del transporte escolar y garantice el derecho a la educación de los niños y niñas, evitando que tengan que buscar alternativas educativas en otros municipios.