A pocos metros de la Alcaldía Municipal de Aguachica y del emblemático parque San Roque, un panorama desolador refleja la falta de atención de las autoridades locales. El antiguo local de Adpostal, que alguna vez fue un punto de referencia para la comunidad, ahora se ha transformado en un basurero a cielo abierto, generando preocupación entre los residentes por las condiciones de insalubridad y el deterioro urbano.
El abandono es evidente: montones de desechos, maleza y olores desagradables invaden el lugar, a pesar de estar estratégicamente ubicado frente a las oficinas del Sisbén, Fonvisocial y la Secretaría de Educación. Esta situación contrasta con la cercanía de estas instituciones, encargadas de velar por el bienestar de los ciudadanos.
«La indiferencia es alarmante. Pasamos por aquí todos los días y parece que nadie hace nada para solucionar esto», comenta un habitante de la zona. Otro ciudadano expresó su descontento: «Es increíble que, a tan solo unos metros de la Alcaldía, en pleno centro de Aguachica, haya un foco de contaminación como este. ¿Dónde están las prioridades de la administración municipal?»
Los residentes temen que este problema se convierta en un caldo de cultivo para enfermedades y afecte aún más la imagen de la ciudad. Además, señalan que este no es un caso aislado, sino parte de un fenómeno más amplio de locales abandonados que, en lugar de ser aprovechados para proyectos comunitarios, se convierten en espacios de deterioro.
Hasta el momento, no se ha observado ninguna acción concreta por parte de las autoridades locales para atender esta problemática. Los habitantes esperan que la administración municipal asuma su responsabilidad y tome medidas inmediatas para limpiar, recuperar y darle un uso adecuado a estos espacios que representan una vergüenza para la comunidad.
Aguachica merece más.